Revolución #53, 16 de julio de 2006


Acusan al teniente Watada, que desobedeció órdenes de ir a Irak

El 5 de julio el ejército entabló acusaciones contra el teniente Ehren Watada por rehusar participar en la guerra criminal contra Irak. A Watada, el primer oficial que ha desobedecido órdenes de ir a Irak, lo acusaron de no presentarse a un ejercicio militar, conducta impropia de un oficial y “desdén contra un funcionario del gobierno” (el presidente Bush). Su brigada salió del fuerte Lewis (estado de Washington) el 22 de junio a Irak.

El ejército lo quiere castigar por tener la valentía de declarar públicamente que no participará en una guerra que cree que “no es justa moralmente” y que es “manifestamente ilegal”. En una declaración el 7 de junio, Watada dijo: “La matanza y el maltrato sistemáticos del pueblo iraquí, y la falta de responsabilidad oficial, son una terrible injusticia moral y una violación de las Reglas de la Guerra Terrestre del mismo ejército. Seguir participando me haría cómplice de crímenes de guerra”.

Eric Seitz, su abogado, dijo: “El ejército ha cometido un grave error al acusarlo por su declaración, que es verídica en cuanto a la manera en que la guerra se inició y se libra, y que no es ni irrespetuosa ni desdeñosa, como afirman”.

El website thankyoult.org informó que el 27 de junio miles de personas en 30 ciudades participaron en manifestaciones en defensa de Watada; por ejemplo, 200 personas se reunieron en las puertas del fuerte Lewis.

El 16 de junio, 150 personas fueron a darle la bienvenida y a apoyarlo en una charla que dio en la iglesia University Lutheran de Seattle. Participaron ex soldados y otras personas que desobedecieron órdenes de luchar en Vietnam y otras guerras, familiares de soldados que han muerto en Irak, familiares y compañeros de Watada, gente progresista de grupos religiosos y de paz y justicia, y militantes de No en Nuestro Nombre y El Mundo No Puede Esperar-Hay que Sacar Corriendo al Gobierno de Bush.

Watada dijo que siente cierta responsabilidad por la muerte de soldados estadounidenses y el sufrimiento de tantos iraquíes porque “tardé tanto tiempo en declarar mi oposición”.

Dijo que entró al ejército después de 11 de septiembre de 2001 “con profundo patriotismo”. Al enterarse de que lo iban a despachar a Irak, sintió la necesidad de estudiar el conflicto para dirigir mejor a su unidad, pero lo que aprendió lo llenó de inquietud: “Era mi deber. Se supone que un militar no tenga dudas, pero hay que saber la verdad. Cuando me enteré, me pareció que no concordaba con mis creencias como estadounidense… No estaba dispuesto a seguir tolerando el dolor y el sufrimiento de los iraquíes en aras de una mentira. Dicen que los militares no tenemos voz, que debemos mantenernos al margen de la política, pero no estoy de acuerdo. Decidí que tenía que condenar la mala conducta del gobierno”. Dijo que tenía que urgir a los militares a cuestionar la legalidad de las órdenes y a pensar en las consecuencias.

Contó que oyó al hermano de un soldado que despachaban de nuevo a Irak quejarse de la falta de protestas, como durante la guerra de Vietnam. Dijo: “Me frustró que nadie se oponía. Decidí que no iba a contar con otras personas, que podía hacerlo yo. Yo soy una persona y un oficial, así que yo podía hacer algo para ayudar al ejército a regresar con sus familiares”.

El público se puso de pie y aplaudió calurosamente por su calmada pero firme resolución de actuar conforme a sus principios, pese a las consecuencias. Después, varios ex soldados contaron lo que les pasó y lo que los llevó a oponerse a la guerra, y otros participantes hablaron de su resistencia.

Watada ha recibido apoyo de otros militares que han desobedecido órdenes. Su familia y sus partidarios apoyan a Sara Rich, la madre de Suzanne Swift, que está en la cárcel del fuerte Lewis por volarse del ejército, en vez de regresar a Irak, donde la violaron y acosaron unos soldados.

Es probable que el ejército celebre una audiencia en julio o agosto para decidir si va a juzgarlo ante un consejo de guerra. El grupo Amigos y Familiares del teniente Watada pide una movilización internacional la víspera del consejo (posiblemente en septiembre), y protestas en centros de reclutamiento militar y frente al fuerte Lewis.

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.

Basics
Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es
From Ike to Mao and Beyond