Estados Unidos: Fuera de Irak

Un año de guerra y ocupación injustas

Obrero Revolucionario #1234, 28 de marzo, 2004, posted at rwor.org

Hace un año, el 20 de marzo, el mundo presenció con horror y furia el inicio de la vil guerra de conquista estadounidense contra Irak. Estados Unidos invadió a un lejano país productor de petróleo, bombardeó las ciudades, destruyó el ejército, tumbó el gobierno, se apoderó de los recursos, amenazó a los vecinos y masacró a miles de civiles y soldados.

En los primeros dos días de la invasión, lanzaron mil proyectiles cruceros y dos mil misiones aéreas contra el país, sobre todo la capital de Bagdad. Entraron en camiones blindados por Kuwait para apoderarse de los importantes yacimientos de petróleo alrededor de Basora en el sur y de Mosul y Kirkuk en el norte. Cruzaron el desierto en tanques, cercaron y tomaron la capital.

Con masivo poderío militar, pulverizaron y tomaron las ciudades. Por ejemplo, dividieron la capital en cuadros de un kilómetro cuadrado y procedieron a destruirlos uno por uno con proyectiles.

Un francotirador de la Infantería de Marina mostró la orientación que les inculcaron: cuando mató a una señora en medio de un ataque a soldados, dijo: "Lástima, pero la vieja se puso en el camino. Nos cargamos unos cuantos civiles, ¿pero qué se va a hacer?".

Pero mataron a sangre fría a más que "unos cuantos civiles". En una redada inicial en Bagdad, la Tercera División de Infantería del Ejército dijo que mató entre dos y tres mil civiles y soldados en su "zona de fuego". Después, la Cruz Roja informó que los hospitales estaban saturados de moribundos y heridos.

Un teniente coronel describió una batalla en la ciudad de Najaf: una columna de tanques arrasó "oleada tras oleada" de luchadores de la resistencia que salían de una fábrica. Otro soldado dijo: "Por decirlo así, casi me siento culpable de la masacre. Eliminamos a mucha gente. Me pregunto cuántos de ellos eran inocentes".

Por su parte, los medios de comunicación, que eran uno de los principales "socios de la coalición", dieron una imagen falsa y distorsionada de la invasión y conquista, manipulando las tomas y haciendo propaganda con las fotos, de modo que diera la impresión de que la mayoría de los iraquíes "le daban la bienvenida" a los invasores.

A comienzos de abril, poco después de tomar Bagdad, montaron una foto de personas agitando banderas iraquíes y estadounidenses y tumbando una enorme estatua de Saddam Hussein en la plaza Fardus. Parecía una efusiva multitud de "civiles agradecidos" dándoles la bienvenida a los "libertadores". Poco después se destapó el montaje: una toma panorámica de la plaza muestra a unos pocos iraquíes en el centro de la plaza rodeados de una bola de soldados, tanques y prensa.

A pesar de una fuerte campaña de desorientación, lograron salir a flote las verdades básicas de la vil e injusta invasión y ocupación.

Las mentiras con que justificaron la guerra

Las mentiras de boca de Bush, Cheney, Powell, Rice, Rumsfeld y el resto de la bola de imperialistas que encabezan el gobierno y ejército estadounidenses justificaron la guerra.

Bush y Cía. decían que Irak tenía armas químicas y biológicas listas y muchos sistemas de lanzamiento y que estaba fabricando "armas de destrucción masiva" más grandes, incluso armas nucleares.

Hablaban del "peligro grave e inminente" de Irak y de que la única opción era una "guerra preventiva".

Afirmaban que la invasión era legal porque con tales armas Irak violaba las resoluciones de la ONU.

Con Irak en la mirilla, declararon la nueva "Doctrina Bush": que lanzarán futuras guerras preventivas si tienen motivos para sospechar que un país o un grupo representa una amenaza emergente a Estados Unidos.

Durante los preparativos para la guerra, el Obrero Revolucionario desenmascaró y descuartizó las mentiras del gobierno sistemáticamente y expuso la verdad.

Del Obrero Revolucionario, 9 de febrero de 2003:

"La larga lista de acusaciones contra el gobierno de Saddam Hussein que presentará Powell no es nada más que un pretexto para una guerra de conquista. Pintar a un país pobre y asediado, con armas primitivas y fuerzas armadas aplastadas, como una amenaza al mundo no es más que un pretexto para una guerra imperial. Continúa la larga tradición de pretextos inventados, como el incidente del golfo de Tomkin con que iniciaron la guerra de Vietnam. Washington amenaza atacar a Irak con armas nucleares, con el pretexto de que Irak posiblemente está tratando de construir un artefacto nuclear primitivo; acusa a Hussein de matar a la oposición, de matar a su propia población, de usar armas de destrucción masiva, de invadir países vecinos... cuando ha cometido exactamente esas barbaridades en una escala con que Hussein ni siquiera podría soñar. ¡Y esperan que nos lo traguemos! Como dice un pasaje bíblico conocido: `¿Por qué ves la pelusa en el ojo de tu hermano y no ves la viga en el tuyo?' (Mateo 7:3)".

Del Obrero Revolucionario , 8 de febrero de 2003, después de que Powell presentó los "argumentos" del gobierno para la guerra ante la ONU y las cámaras de televisión del mundo:

"A diferencia del general Powell, Irak no tiene la capacidad para bombardear un país al otro lado del mundo. Así que para crear una `amenaza', Powell dice que Irak podría dar venenos biológicos a Al Qaeda y que este podría llevarlos a una ciudad estadounidense. El problema es que no existen pruebas de tal `lazo'. El discurso era una cortina de humo para tapar los verdaderos motivos de esta guerra. El gobierno se está preparando para la guerra, y el pueblo tiene que despejar el humo y desenmascarar las mentiras con que buscan presentar una conquista imperialista como una medida de seguridad para la ciudadanía".

Desde entonces, han salido más pruebas de las mentiras sobre las armas de destrucción masiva (ADM) de Irak.

En mayo de 2003, la CIA puso a David Kay a la cabeza de 1,400 soldados, agentes de la CIA, interrogadores y expertos en armas y le encomendó buscar ADM en Irak. En enero de 2004, Kay renunció y dijo que no existen ADM en Irak y no han existido desde hace mucho tiempo.

Del Obrero Revolucionario, 8 de febrero de 2004:

"No encontraron ninguna arma biológica, química ni nuclear. Ningún arsenal. Ningún complejo para producirlas. Ningún misil SCUD ni otro vehículo para lanzarlas. Ningún laboratorio para construir prototipos. Ningún laboratorio móvil. Ni un solo barril, proyectil, onza de uranio, documento comprometedor, ni declaración de un científico iraquí intimidado. Absolutamente nada... ¡La gran mentira que ofrecieron como pretexto para atacar a Irak se está desmoronando!... La credibilidad del gobierno y del presidente está por el suelo y las acusaciones que Washington suelte contra otros países en el futuro sembrarán dudas".

¿Qué motivó la guerra?

En Estados Unidos y en el mundo millones se opusieron enérgicamente a la guerra. Francia, Alemania, Rusia y China se opusieron a una guerra inmediata contra Irak. El Consejo de Seguridad de la ONU se dividió.

Pero eso no le importó un bledo a Bush y Cía: se jactaron de que estaban dispuestos a lanzarse a la guerra, sin importar las acciones ni opiniones de los demás.

¿Qué motivó la febril cruzada hacia la guerra?

Del Obrero Revolucionario, 16 de marzo de 2003:

"Para los que detentan el poder, la meta es imponer la voluntad de Estados Unidos a todo el mundo por todas partes, a las masas y a sus aliados. Conquistar a Irak es la `segunda fase' de una campaña para afianzar la dominación yanqui por muchas décadas.

"Los gobiernos de Francia y Alemania se oponen a esta guerra precisamente porque saben que controlar el golfo Pérsico le permitiría a Estados Unidos dominarlos política y económicamente, y le daría mucho más control del tercer mundo.

"Dick Cheney, Donald Rumsfeld y Paul Wolfowitz (otro estratega del Pentágono) idearon y planearon esta guerra para conquistar y dominar a Irak a mediados de la década pasada, antes de que los sucesos del 11 de septiembre de 2001 les dieran un pretexto. Según ellos, los socios menores, como Francia y Alemania, desempeñaron un papel útil en el conflicto con la Unión Soviética en la década de los 80, pero no `merecen' el poder de vetar las acciones de Estados Unidos hoy. Piensan que hay que rebajar el papel de `la vieja Europa' en el mundo actual `unipolar'.

"Todo esto explica por qué toda la cháchara de `armas de destrucción masiva' y `lazos al terrorismo' no es convincente: son puros pretextos públicos y no tienen nada que ver con los verdaderos motivos.

"La `única superpotencia' planea aprovechar la `superioridad militar' para reconfigurar radicalmente las relaciones mundiales y dominar a todos. `Están con nosotros o contra nosotros' es el lema de la dominación mundial que busca".

El economista político maoísta Raymond Lotta, en "La doctrina de Bush: La cruzada del imperialismo estadounidense por un imperio mundial único", del Obrero Revolucionario,23 de febrero de 2003, escribió:

"...desde el 11 de septiembre. Estados Unidos lanzó una guerra brutal contra Afganistán que cobró más vidas que el ataque a las Torres Gemelas. A principios del 2002 tenía tropas en Filipinas, Yemen y Somalia. Estableció 13 nuevas bases militares en los países productores de petróleo y gas de los alrededores de Afganistán. Y empezó la mayor acumulación de fuerza militar desde los años de guerra fría del gobierno de Reagan.

"Los estrategas y estadistas hablan de una `guerra sin límites'... El estado mayor ha adoptado calladamente un plan militar de 20 a 30 años de guerra contra varios estados y grupos armados por todo el mundo...

"Esta es la esencia de lo que está pasando: bajo el manto de la guerra contra el terrorismo, el imperialismo estadounidense está buscando un nivel completamente nuevo de dominación mundial. Ese es el sucio secreto de la `guerra contra el terrorismo', que usa como un cheque en blanco para atacar a cualquier oponente que escoja, inclusive movimientos revolucionarios auténticos como las guerras populares maoístas de Filipinas y Nepal. La `guerra contra el terrorismo' es una ofensiva político-militar-ideológica para alcanzar una gran variedad de objetivos del imperio, con métodos y metas extremos y peligrosos".

¡Estados Unidos fuera de Irak!

En el último año, el pueblo iraquí ha vivido una guerra, invasión y ocupación injustas.

Desde la primera guerra contra Irak en 1991, la población civil sufrió bajo un asesino embargo al mando de Estados Unidos, privada de medicamentos, alimentos y artículos de primera necesidad. Cada mes, morían miles de personas, especialmente niños.

Hoy, el pueblo iraquí vive bajo la bota de la ocupación: un país dominado y controlado directamente por una potencia hostil. A diario, soldados yanquis fuertemente armados invaden hogares en busca de luchadores de la resistencia. Llevan a cabo rastrillajes para apresar y encerrar en las mazmorras del gobierno de Hussein a todo presunto "militante". Con la policía títere iraquí balean a los manifestantes que piden salarios, servicios o elecciones.

Hoy, el pretexto inicial de la guerra, "encontrar las ADM", está desenmascarado; pero el gobierno de Bush y sus defensores tienen otro: la guerra fue para "liberar" a Irak y llevar la "democracia" a toda la región. Sin embargo, el engaño y la hipocresía de eso quedaron al desnudo en las maniobras estadounidenses de las elecciones en Irak.

Los invasores tienen prisa: quieren confeccionar un nuevo gobierno "soberano" que "invite" al ejército yanqui a quedarse en territorio iraquí, venda las principales industrias iraquíes a capitalistas extranjeros y firme contratos por el petróleo. Así que en noviembre de 2003 anunciaron el plan: organizar reuniones de "gente de peso" de cada provincia, sacar de ahí una serie de delegados y ponerlos a que escojan una "legislatura interina" que luego forme un nuevo gobierno.

En una palabra, buscar, organizar y entrenar a fuerzas proyanquis y, después, convertirlas en un gobierno títere en el Irak ocupado.

Pero el plan se echó a perder, pues el principal líder de los chiítas pidió elecciones directas en la primavera para formar un nuevo gobierno. De inmediato, el gobierno estadounidense dijo que no. Cuando brotaron grandes protestas por todo el país, las fuerzas de ocupación les abrieron fuego.

Del Obrero Revolucionario , 1° de febrero de 2004:

"Washington se opone a celebrar elecciones hoy porque teme que ganen elementos que no concuerden con sus planes. Sabe que las fuerzas políticas mejor organizadas hoy son los fundamentalistas islámicos en el sur y los partidos curdos separatistas en el norte.

"Poderosas fuerzas del Pentágono y la Casa Blanca están trazando planes para atacar a Irán y no quieren un gobierno en Irak dispuesto a apoyar al gobierno chiíta iraní. En el norte, el plan es negarle autonomía, fuerzas armadas independientes y control de las ciudades y campos petroleros a los curdos...

"Solo quiere celebrar elecciones si contribuyen a la estabilidad y dan legitimidad al nuevo orden (o sea, dan un sello de aprobación a las fuerzas políticas que ya ha escogido)".

Ante esta ocupación injusta, ilegítima e inmoral, en Estados Unidos, la "madre patria" del imperio, tenemos una responsabilidad especial de clamar: "¡Invasores yanquis fuera de Irak!".

Dicen que lo hacen por los intereses y la seguridad de la población de Estados Unidos. Es nuestra responsabilidad para con los pueblos del mundo decir la verdad y oponernos con toda nuestra fuerza y creatividad a los crímenes que está cometiendo el imperialismo yanqui en nuestro nombre... en Irak y en todo el mundo.