Revolución #161, 12 de abril de 2009


Evento benéfico en Harlem para el Fondo de Literatura Revolucionaria para Presas y Presos:

“¡Repartamos Revolución ahí dentro!”

15 de marzo de 2009. Las calles bullen de gente en esta tarde primaveral afuera del antiguo salón de baile Audubon ubicado en el 3940 de la Broadway en la Ciudad de Nueva York. Hoy, el ya denominado Centro Memorial y Educativo Malcolm X y Dra. Betty Shabazz es la sede de una presentación benéfica para el Fondo de Literatura Revolucionaria para Presas y Presos (FLRP) y su Campaña para Alcanzar a las Mujeres Reclusas.


(en Inglés)

El evento fue auspiciado por la abogada de la gente Lynne Stewart y su compañero, Ralph Poynter. Lynne Stewart se encuentra en la actualidad en el proceso de apelación a una sentencia de prisión por haber sido procesada y condenada bajo cargos criminales por acciones relacionadas con su defensa de un cliente. Los acompañaron Marie Runyon y el Padre Lawrence Lucas, quienes son activistas de larga trayectoria, y también Juanita Young, Nicholas Heyward Sr. y Margarita Rosario, todos quienes son madres o padres de jóvenes que han muerto a manos de la policía y son participantes en la lucha contra la brutalidad policíaca. Al inicio y al cierre del evento hubo emotivas presentaciones de tamborileo africano y música hiphopera y rock que animaban a la gente a que moviera los pies y a pasárselo a gusto.

Lynne Stewart inició el evento con este reto: “Repartamos el periódico Revolución ahí dentro, y de ese modo empecemos; no se puede inundar las prisiones con gente… aunque sería muy bueno entrar y comunicarnos… pero sí se puede repartir Revolución ahí adentro, para que abran sus mentes y ojos, y que conozcan la sociedad que los ha metido en donde se encuentran”.

Nellie Bailey, directora del Consejo de Inquilinos de Harlem, e Iyaluua Ferguson, de la Organización de Unidad Afroamericana, reconocieron a presos políticos como Mutulu Shakur y Ruchell Magee, y también a Herman Ferguson, esposo de Iyaluua, quien presenciaba el evento. Herman Ferguson, además de ser presidente de la OUA por muchos años, fue también preso y refugiado político. Ocurrió un momento dramático durante el evento cuando se mostró un mensaje por video (puesto en línea en revcom.us) por parte de Yuri Kochiyama, quien estuvo presente en el salón de baile Audubon cuando en dicho local asesinaron a Malcolm X (éste murió en sus brazos de ella) y se ha dedicado la vida para luchar por la justicia.


(en Inglés)

También se mostró un potente mensaje por video por parte del padre Luis Barrios (también en revcom.us), quien se encontraba en ese momento cumpliendo dos meses de condena en una prisión federal por participar en una manifestación a favor de cerrar la Escuela de las Américas. Finalizó su mensaje de este modo: “Ahora, llamo a la gente a que exprese esta solidaridad, compre una suscripción para que en distintos lugares, no solamente en prisiones para hombres sino también para mujeres, no solamente en prisiones para adultos sino también para jóvenes, todos ellos puedan recibir el periódico, leer el periódico, organizar por medio del periódico, despertarse y crear una revolución”.

El corazón y alma del evento se dio en la forma de una lectura de cartas a Revolución escritas por presos. Unos dotados actores profesionales tomaron parte junto con un lector y repartidor de Revolución que ya tiene muchos años residiendo en un proyecto de vivienda en Harlem. Las cartas a Revolución desde detrás de las rejas fueron emotivas, inspiradoras y conmovedoras.

Aladdin Ullah, dramaturgo y actor, le dijo a Revolución: “Creo que una cosa que he notado, puesto que yo mismo soy escritor, y al diseccionar la manera en que se escribe algo, al considerar la manera en que se escribió esta carta, ¡destila tanta pasión y también un anhelo por buscar la verdad a fondo! Es como si los reclusos hubieran estado viviendo en un sistema de mentiras,y la baja autoestima que proviene de estas mentiras. Al descubrir una certeza, como presenta el periódico Revolución, desde todos los aspectos de la evolución, hasta la religión, y hasta el gobierno corrupto, al exponerse uno a todo eso, es como si quisiera celebrar frente al mundo lo que uno conoce: ‘¡Yo conozco esta verdad y quiero compartirla con todo el mundo!’Así que de estas cartas percaté un sentido de algún tipo del júbilo, y digamos un recién nacido que se despierta, y el hilo único que tienen en común es un despertar y de entender mejor lo que en realidad está ocurriendo”.

Agregó: “He leído el periódico varias veces, y tengo una suscripción anual, y creo que un periódico es importantísimo para poder informarles a los reclusos y a todos acerca de la verdad y lo que realmente está ocurriendo en los Estados Unidos y por todo el mundo.… Es uno de los periódicos más honestos y siento como que toda la gente en Estados Unidos estuviera atragantándose con pura mierda. El periódico Revolución es uno de los pocos periódicos que sacan a la luz la verdad”.

Agregó: “En cierto modo puedo sentir ese despertar, ese sentimiento de conectarse con algo humano y en lo fundamental sentir que no se ha desperdiciado la vida y que hay esperanza, y por eso creo que el periódico Revolución es de veras significativo. Puede ser que “esperanza” hoy sea una palabra peligrosa porque se utiliza por motivos ocultos, pero yo creo que el periódico Revolución brinda un gran servicio. Porque le da la verdad a esta gente. Por lo tanto, antes de que usted cuente con la esperanza, tiene que contar con la verdad, y tiene que poner al descubierto las mentiras... y por eso creo que este periódico es tan importante — y porque este programa debe continuar dentro del sistema penal”.

Agregó otro actor: “Revela tanto, con respecto a las palabras de este periódico, a la potencia que destilan, y estas cartas en sí comprenden la prueba de ello; de estar convencido, de estar conmovido, ahora, y no solamente afectado, sino querer ser participante para afectar a los demás".

“Usted dijo un despertar”, continuó. “Esta palabra escrita prendió luces en los hogares de estas gentes, y para sus adentros, y les hizo percibir cosas en la habitación, en el rincón, en la oscuridad, de manera que ahora desean compartirlo con otros. Es cosa bellísima”.

Joe Veale, un escritor de Revolución que fue preso en los años 60, mandó la carta de cierre. Los actores que presentaron esta carta actuaron su lectura en un conjunto dramático, recreando un intercambio de ideas detrás de las rejas que se relata en la carta:

Un preso sostiene que: “…los ricos y los pobres siempre han existido y siempre existirán. Los ricos y poderosos siempre dominarán a los pobres y los que no tienen poder… ¡lo mejor que se puede hacer en cuanto a esta situación es lo que hizo Robin Hood!” (o sea, tomar de los ricos para dar a los pobres).

Y le respondí: “…una perspectiva en la que las cosas nunca cambian, en la que quedan fijas en el tiempo y el espacio, en la que siguen constantemente repitiéndose — ¡es una perspectiva metafísica de la historia y no se conforma con los hechos! ¡Necesitas estudiar el materialismo dialéctico e histórico para que puedas entender y percibir cómo se desarrolla y cambia la historia humana, y por qué ya no es necesario vivir de la manera por la cual argumentas”!

Después de la lectura de las cartas, el anfitrión hizo un llamado a todos los presentes a que hicieran generosas contribuciones al Fondo. “A la gente le cuesta trabajo pagar el alquiler, mantenerse en sus cabales y hay una alta probabilidad de que las cosas se vayan a volver aún más difíciles. ¿Cuál va a ser nuestro carácter esencial? ¿Cuál es la moral que representa la sociedad de la que está hablando esta gente? Una sociedad comunista revolucionaria…. ¿Cuál es la ética que necesitamos? Sostengo que necesitamos una ética de colectividad, en la que la gente lucha los unos por los otros, en la que velamos los unos por los otros, en la que la gente tiene la voluntad de hacer sacrificios para hacer avanzar la situación y no busca cada quien por sí mismo. ¿Y cuántas suscripciones a este periódico? ¡800 de ellas vencen a finales de este mes! ¡800 suscripciones! Y eso no solamente se trata de pagar las suscripciones que ya tenemos, sino de que hay cientos de presos que desean recibir este periódico, ¡pero no pueden recibirlo! Necesitan recibirlo, y necesitan leer en este periódico en las semanas que entran que la gente aquí presente en este salón hizo algo altamente significativo en este día”.

Anunció que una prominente organización de derechos civiles había contribuido $250 dólares; un doctor y personaje en la lucha por el derecho al aborto también contribuyó $250 dólares y lanzó un reto a la gente a que aportara la misma cantidad — y varias personas sí lo hicieron. En un momento muy potente Juanita Young puso suficiente dinero en la canasta para costear cinco suscripciones para presos. Otras personas prometieron recaudar fondos entre sus amigos. En total se recaudaron varios miles de dólares y se sentó las bases para nuevas rondas de difusión y de recaudación de fondos y para asegurar que todo preso que pide una suscripción a Revolución — en prisiones para hombres o mujeres — pueda recibirla.

Revolución recibió lo siguiente del Fondo:

Haga una donación al Fondo de Literatura Revolucionaria para Presas y Presos. Su donación puede importar AHORA:

$ 35 costeará un pedido de una suscripción de un año a Revolución $ 175 costeará una suscripción de un año para 5 presas/os $ 250 costeará muchos pedidos de libros y literatura $ 3.500 costeará la mitad del proyecto de nuevas suscripciones para presas $6.000 costeará parte de la lucha contra la censura.

El Fondo es un proyecto del International Humanities Center, una organización benéfica sin fines de lucro exenta de los impuestos federales según la Sección 501(c)(3) del Internal Revenue Code (IHCenter.org). Para contribuir al Fondo, haga su cheque pagadero a nombre de: IHCenter/PRLF y envíalo por correo postal a:

International Humanities Center o Prisoners Revolutionary 860 Via de La Paz, Suite B-1 Literature Fund Pacific Palisades, CA 90272 1321 N. Milwaukee, #407 Chicago, IL 60622

Presos en un penal de Estados Unidos posan con el periódico Revolución.

Para ofrecerse de voluntaria/o o comunicarse con el Fondo, llame a (773) 793-8637

o envíe un e-mail a prlf_fund@yahoo.com. Busque más información sobre el Fondo en www.prisonersrevolutionaryliteraturefund.org.

Nuestra Misión: El Fondo de Literatura Revolucionaria para Presos es un fondo de literatura educativa que llena los pedidos de literatura revolucionaria de los presos y las presas en Estados Unidos.

(Vea nuestra Declaración de Misión íntegra y más datos sobre el fondo en www.prisonersrevolutionaryliteraturefund.org.)

 

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.

Basics
Revolución: por qué es necesaria, por qué es posible, qué es
From Ike to Mao and Beyond