¡Todos somos Trayvon, y necesitamos llevar este mensaje a las calles!

¿QUÉ PASA CUANDO DEJAMOS QUE EL SISTEMA FUNCIONE?

Carl Dix | 30 de junio de 2013 | Periódico Revolución | revcom.us

 

"Hemos logrado hacer lo que nos propusimos. Todo lo que queríamos desde el principio era ver este caso en la corte. Ahora que Zimmerman va a juicio, la gente necesita sentarse y dejar que la corte haga su trabajo". Esta declaración la hizo Benjamin Crump, el abogado defensor de los padres de Trayvon. Unas declaraciones similares las han hecho unos individuos cercanos al caso, como el reverendo Al Sharpton, entre otros. Tales declaraciones son erróneas y peligrosas.

Decir eso es pasar por alto la brutal opresión que este sistema históricamente ha reforzado sobre el pueblo negro. No ve lo que está concentrado en este caso y lo que movilizó a muchas personas a salir a las calles indignadas por todo el país para declarar: "Todos somos Trayvon". Las declaraciones de este tipo también podrían terminar por matar cualquier oportunidad de obtener justicia en este caso.

LA BRUTALIDAD HISTÓRICA

Dígame, ¿cuándo lo de dejar que el sistema funcione ha traído justicia para el pueblo negro? Bajo la esclavitud el pueblo negro era propiedad, trabajaba como caballos de arado desde que salió hasta que se pusiera el sol. Los sometieron al azote y a otras formas de brutalidad por cualquier trasgresión real o imaginaria. Cualquier hombre con el permiso del amo de la plantación podía violar a una negra esclava como le pegara la regalada gana. Cuando el esclavo Dred Scott logró presentar una demanda contra la esclavitud ante las cortes, la Suprema Corte estadounidense de dictaminó que el pueblo negro no tenía derechos que los blancos tuvieran que respetar. ¡Así es la manera en que funcionó el sistema!

Desde los tiempos en que arrastraron encadenada a la gente negra a estas costas, sucedieron unas 250 revueltas de esclavos, según la documentación. Alrededor de Estados Unidos, un amplio movimiento abolicionista luchó contra la esclavitud. Finalmente, se dio la guerra de Secesión, en la que muchos negros, incluyendo unos ex esclavos, combatieron y murieron para terminar la esclavitud formal en el Sur. Pero solo una década después de la abolición de la esclavitud, sometieron al pueblo negro a la esclavitud bajo otro nombre. Se permitía que pudieran arrestar a los negros quienes no habían hecho nada malo, levantarles cargos ante las cortes y condenarlas a trabajar en cuadrillas encadenadas con grilletes o en las minas, fábricas o plantaciones en unas condiciones que eran a menudo peores que en la esclavitud. No tenían ninguna manera de impugnar esas horrorosas injusticias. ¡Así el sistema siguió funcionando!

Entre el final de la guerra de Secesión y los años 1960, casi 3,500 negros fueron linchados en este país. La mayoría de las víctimas del terror de estas turbas de linchamiento ni siquiera eran sospechosos de haber cometido ningún crimen. Los registros oficiales de los linchamientos muestran que a menudo lincharon a un negro simplemente porque una turba racista no podía encontrar al individuo que buscaba. Esos registros también enumeran los casos de los individuos linchados porque se consideraba que eran muy presumidos o porque los blancos estaban celosos por sus éxitos. ¡Nunca condenaron a ningún blanco por esos linchamientos! Por ley o por costumbre (Jim Crow), a los negros no se les permitían levantar denuncias contra un blanco o dar testimonio contra un blanco ante las cortes. Otra vez, ¡así funcionó el sistema tal como siempre ha funcionado! De nuevo, esta situación sólo cambió como resultado del sacrificio heroico del pueblo en las luchas por los derechos civiles y la liberación negra, junto con otros problemas con los que el imperio yanqui se estaba encontrando cuando por todo el mundo el pueblo correctamente vinculaba "la democracia estadounidense" con la segregación, el racismo de los blancos y el Ku Klux Klan y los golpes y asesinatos policiales contra los activistas de derechos civiles.

Pero debido a que el sistema no fue derrocado, hoy existe un nuevo Jim Crow. Hoy la policía que patrulla los ghettos y barrios como ejércitos de ocupación inflige la brutalidad y hasta el asesinato sobre las comunidades negras y latinas en todo el país. El proyecto Vidas Robadas de la Coalición 22 de Octubre para Parar la Brutalidad Policial documentó que solamente en los años 1990, la policía y otros agentes del orden público mataron a más de 2000 individuos. En su mayoría eran jóvenes negros o latinos, no llevaban arma y no estaban involucrados en ninguna actividad delictiva cuando los mataron. Pero casi nunca castigan a los policías asesinos cuando tratan con brutalidad y matan a los individuos inocentes no armados. En las poquísimas ocasiones en que han procesado a un policía por tratar con brutalidad o matar a un individuo, casi siempre lo dejan en libertad porque a los fiscales se les olvida procesar y los jueces hacen lo posible para dejarlos en libertad. De nuevo, ¡así funciona el sistema como siempre ha funcionado!

Cualquiera que diga que podemos esperar justicia para Trayvon Martin al dejar que el sistema funcione, o no conoce las formas en que en la historia el sistema ha infligido la injusticia sobre los negros o espera que aquellos que lo escuchan no conozcan esta historia.

Se puede divisar lo que implica el funcionamiento del sistema meramente al ver el asesinato de Trayvon Martin. Los policías llegaron a donde George Zimmerman, un justiciero vigilante aspirando a policía, parado sobre el cuerpo tendido de Trayvon Martin, con el arma en la mano con la que lo mató. Los policías llevan a Zimmerman a la delegación de la policía y lo sacan en libertad por la puerta de atrás. Le practican un análisis de droga al cuerpo de Trayvon, sí, sobre el cadáver de la víctima, ¡pero no le practican dicho análisis sobre el asesino! Así funcionó el sistema, de la misma maldita manera que siempre ha funcionado.

Están procesando a Zimmerman porque la gente no permitió que el sistema funcionara como de costumbre. La juventud negra y latina tomaron la delantera en esta lucha y se les unieron muchas personas de diferentes nacionalidades y sectores sociales. Los jóvenes actuaron porque conocían el estigma de la criminalización de parte de esta sociedad, obligados a vivir con una diana sobre la espalda. Se pusieron de pie y dijeron: ¡BASTA YA! Otros se les unieron porque no querían vivir en un mundo que trata con brutalidad y mata simplemente por el color de la piel. Para terminar este horrible ultraje y todos los otros ultrajes que este sistema llueve sobre el pueblo del mundo (las guerras por el imperio, la violencia contra la mujer, el saqueo del planeta, etc.), se requiere una revolución — nada menos. Ahora mismo se requiere la decidida resistencia de masas para tener una buena posibilidad de obtener la justicia en este caso y para que nuestros jóvenes dejen de recibir un tratamiento como si fueran culpables hasta que se demuestre su inocencia, si es que pueden sobrevivir para corroborar su inocencia.

Zimmerman va a juicio por matar a Trayon únicamente porque la gente se tomó las calles con la declaración: "¡Todos somos Trayvon!" No lo están procesando porque el sistema comenzó a funcionar en este caso.

Si ahora nos sentamos con los brazos cruzados y dejamos que el sistema funcione, es probable que el sistema funcione como siempre ha funcionado, como ya ha funcionado en este caso. Es probable que vuelva a dejar en libertad a Zimmerman. Ya hay indicios que esto ya está pasando. Las noticias informan que el jurado se compone de puros blancos excepto un jurado (cuya nacionalidad no se ha informado). Según se informa, una jurada blanca preguntó por qué Trayvon estaba comprando dulces durante la noche (¡murió un poco después de los 7 p.m.!) Deberían impedir que fuera una jurada por ser obviamente prejuiciada. Pero eso no ocurrió. La fiscalía trató de usar una de sus objeciones permitidas para impedir que fuera jurada, pero el juez la denegó y la mantuvo en el jurado. Mientras tanto, impidió que otro individuo fuera jurado porque su pastor había escrito algo en apoyo a Trayvon Martin.

Por eso no podemos dejar que el sistema "funcione" como siempre ha funcionado y la forma en que está funcionando ahora. Si ponen en libertad a Zimmerman, eso constituiría una gran injusticia en sí y una declaración de una temporada de caza contra la juventud negra. No podemos permitir que eso pase en silencio, lo cual quiere decir que la gente tiene que continuar e intensificar la protesta política que reclama la justicia — ahora mismo, y no después de que el sistema "funcione" de nuevo como siempre funciona.

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