De un lector:

Casa californiana de LeBron James pintarrajeada con la palabra “N”
“El odio en Estados Unidos, sobre todo para los afroamericanos, es el pan de todos los días”

7 de junio de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

Viernes 2 de junio de 2017. El miércoles por la mañana se descubrió la palabra N pintada en el portón principal de la casa de LeBron James en Brentwood, California.

James respondió: “No importa cuánto dinero tengas, no importa qué tan famoso seas, no importa cuántas personas te admiren, ser negro en América es duro. Sólo muestra que el racismo siempre será una parte del mundo, una parte de Estados Unidos. Y, pues, el odio en Estados Unidos, sobre todo para los afroamericanos, es el pan de todos los días... Tenemos un largo camino por recorrer como una sociedad y para nosotros como afroamericanos hasta que nos sintamos iguales en Estados Unidos”.

También dijo que una de las primeras cosas que se le vino a la mente al ver el grafiti fue la madre de Emmett Till, un adolescente afroamericano de 14 años brutalmente asesinado en Misisipí en 1955. La madre de Till dejó el ataúd abierto en el funeral de Emmett para que la gente viera el cuerpo mutilado de su hijo. James dijo que “ella [la madre de Till] quería mostrar al mundo lo que su hijo sufrió... como negro en Estados Unidos”.

James es un jugador estelar de la NBA y está en las finales de la NBA con su equipo, los Cavaliers de Cleveland, en contra de los Golden State Warriors.

Un par de vecinos blancos de James en la comunidad adinerada de Brentwood de Los Ángeles lo comentaron con los noticieros angelinos de la CBS. Uno dijo: “Es terrible que algo así haya pasado aquí. Es espantoso”. Otro dijo: “Es preocupante. No está bien para nada”.

James ha denunciado anteriormente el racismo y el asesinato policial de los negros. Se vestía una camiseta de calentamiento con la frase “No puedo respirar” en memoria de Eric Garner, asesinado por los policías de Nueva York, y él y sus compañeros del equipo el Miami Heat llevaban sudaderas negras con capucha como una forma de protesta por el asesinato de Trayvon Martin a manos de un justiciero en Florida. Hace poco, habló en contra del racismo que experimentó el jardinero de los Orioles de Baltimore, Adam Jones, durante un partido de béisbol en Boston.

La declaración de James de que “el racismo siempre será una parte de Estados Unidos” refleja la verdad de lo que dijo Bob Avakian en Lo BAsico 1:1: “Sin la esclavitud, Estados Unidos no existiría tal como lo conocemos hoy. Eso es una verdad simple y básica”.

Desde la elección de Donald Trump, se ha producido un gran aumento de crímenes de odio denunciados en Estados Unidos. El Centro para el Estudio del Odio y el Extremismo en la Universidad Estatal de California-San Bernardino informó que se ha dado un aumento de 23,3% de los crímenes de odio “que comenzó durante la campaña presidencial y se ha mantenido constante” contra los negros, los inmigrantes, los judíos y los musulmanes en los seis principales centros urbanos de Estados Unidos.

La semana pasada, en Portland un racista fascista mató a dos personas y una tercera sobrevivió por un apuñalamiento en la garganta, cuando las tres acudieron a defender a dos adolescentes negras que eran objeto de mierda odiosa de este racista. El mes pasado en un partido en Boston, unos hinchas le tiraron bolsas de cacahuetes y insultaron con la palabra N a Adam Jones, que juega béisbol para los Orioles de Baltimore. Tan solo ayer se encontró una segunda soga colgada en un museo del Smithsonian en Washington D.C, en esta ocasión en la sección sobre la segregación en el Museo Nacional de la Historia y Cultura Afro-Americana. El enorme auge de este tipo de necedades racistas perpetradas contra las personas por los supremacistas blancos es un elemento de la apariencia que tiene el fascismo en Estados Unidos.

El fascismo es el ejercicio abierto de la dictadura abierta por la clase burguesa (capitalista-imperialista), que gobierna apoyándose en el abierto terror y violencia, pisoteando lo que se supone son derechos civiles y legales, utilizando el poder del estado y movilizando a grupos organizados de golpeadores fanáticos para cometer atrocidades contra las masas populares, particularmente contra los grupos de personas que identifica como “enemigos”, “indeseables” o “peligros para la sociedad”.

Esta mierda tiene que terminar.

Expulsar al régimen fascista de Trump y Pence.

 

       

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