Huelga de hambre en el pabellón de la muerte de SCI Greene

Obrero Revolucionario #949, 22 de marzo, 1998

El 6 de marzo, de 28 a 35 presos del pabellón de la muerte de SCI Greene en Waynesburg, Pensilvania, entraron en huelga de hambre por una nueva serie de crueles reglas. SCI Greene es el penal donde está el preso político Mumia Abu-Jamal. La mayoría de los condenados a muerte son de Filadelfia. Al cierre de esta edición, la huelga continúa pero los medios grandes no la han mencionado en absoluto.

El 5 de marzo, las autoridades carcelarias anunciaron un nuevo ataque contra los presos del pabellón de la muerte. Con el pretexto de que las reglas no son "uniformes", pusieron en vigor una nueva serie de reglas sumamente represivas que llaman "Cambios a las reglas en casos capitales". Un memorando del director de SCI Greene a los 111 presos del pabellón de la muerte dice: "Estos cambios entrarán en vigor hoy, 5 de marzo de 1998, con un registro de la celda de todos los presos condenados a la pena capital".

Los presos se enteraron de las nuevas reglas a las 7:45 de la mañana, cuando los guardias entraron a la fuerza y les robaron sus pertenencias. Les quitaron fotos familiares y recuerdos de sus seres queridos, tanto como los libros y documentos con que preparaban sus apelaciones. Confiscaron hasta ropa interior. Almacenaron los materiales de derecho, pero empacaron todo lo demás.

Mumia Abu-Jamal no está participando en la huelga de hambre pero la apoya (ver su declaración). Los guardias le quitaron todas sus pertenencias y papeles (17 cajas) y le dijeron que las van a destruir si no paga el flete. Quitarle sus papeles significa que no podrá continuar sus clases universitarias, leer las miles de páginas de documentos sobre su caso o mantenerse al tanto de lo que está pasando en la sociedad en general, lo que es crucial a las decisiones que tiene que tomar para su defensa.

Los presos de SCI Greene dicen que en realidad el ataque es una represalia por el aumento de demandas de presos contra las autoridades carcelarias, algunas de las cuales han ganado en los tribunales. Mumia mandó esta declaración: "Hace varios años en mi libro Live from Death Row [En vivo desde el pabellón de la muerte] escribí sobre el `ataque a la vida intelectual'. Ese es el propósito de este ataque. De un solo golpe el gobierno ha castigado a todos los presos del pabellón de la muerte por ejercer su derecho constitucional de entablar demandas y ganar. No se ha hecho nada para merecer medidas tan duras e irrazonables. Es una represalia por el ejercicio del derecho de luchar en los tribunales y una continuación de la política de `combatir el crimen', que tiene motivos políticos".

Las nuevas reglas son:

  • Ejercicio: se limita a una hora al día, cinco días a la semana
  • Ropa: los presos solo pueden tener uniformes rayados, zapatos, dos prendas de ropa interior y "artículos de tocador básicos"
  • Visitas: solo se permite una visita personal de una hora sin contacto a la semana (en vez de dos horas); la mayoría de los presos son de Filadelfia, así que sus amigos y familiares tienen que viajar seis horas o más para visitarlos una hora
  • Llamadas telefónicas: se limitan a una llamada a la semana de 15 minutos a cobro revertido
  • Pertenencias: solo se permite lo que cabe en una caja; todos los materiales de lectura jurídicos, religiosos, educativos y deportivos tienen que caber en esa caja; se permite almacenar algunos documentos jurídicos, pero el preso tiene que pagar el flete de las demás pertenencias a familiares o serán destruidas; los presos dicen que las autoridades ya han confiscado muchas pertenencias; solo se puede conseguir un periódico si un preso entrega un número previo; aunque se permite tener televisores y radios, los guardias han confiscado antenas
  • Compras: se limitan las cosas que los presos pueden comprar y se prohíbe la compra de comida, porque no se permite en las celdas
  • El asesor espiritual de Mumia, Steve Wiser, le dijo al OR que las autoridades anunciaron que un médico está examinando a los participantes de la huelga de hambre a diario. Pero los presos dicen que no es verdad y que les han dicho que los alimentarán a la fuerza si se enferman.

    Las nuevas reglas son otro golpe más en una situación ya horrible. Wiser visita SCI Greene con frecuencia y nos dijo que normalmente le niegan la entrada a familiares que han viajado seis horas o más de Filadelfia. En muchos casos, el pretexto es una máquina de alta tecnología que se llama IONSCAN, que inspecciona a las visitas en busca de cantidades infinitesimales de droga o explosivos. A un muchacho de 13 años que nunca había visto a su padre no le permitieron entrar por eso. A un partidario de Mumia, Ali-Bey Hassan (uno de los 21 Panteras), no le permitieron entrar porque la IONSCAN descubrió "residuos de explosivo". ¡Resulta que lo que "descubrió" fue el azufre de una cerilla con que encendió un cigarrillo! Por lo general esa máquina se utiliza al azar, pero siempre a visitas de Mumia.

    En una carta de protesta contra las nuevas reglas, el secretario nacional de ¡Rehusar & Resistir!, el Dr. Robert Rockwell, dijo:

    "Mumia Abu-Jamal, uno de los presos de SCI Greene, ha escrito que estos nuevos ataques castigan `a todos los presos del pabellón de la muerte por ejercer su derecho constitucional de entablar demandas y ganar'. Mumia ha trabajado con su equipo legal en la preparación de sus apelaciones. Otros presos del pabellón de la muerte que son pobres y no tienen asesoría legal adecuada perderán su derecho constitucional de habeas corpus. Las nuevas reglas coinciden con las fuertes restricciones al derecho de apelar a los tribunales federales que impuso la Ley para Combatir el Terrorismo y de la Pena de Muerte Efectiva. El derecho a apelar es uno de los baluartes de la Constitución y ahora está sitiado. Sin asesoría legal ni acceso a libros de derecho, la mayoría de los condenados a muerte perderán ese derecho básico. Las reglas son una represalia por las muchas demandas ganadas por los presos. No solo les quitan un derecho básico; además buscan quebrantarles mente y alma. Restringen las visitas de familiares, y libros y televisión. A los ojos del mundo entero, la pena de muerte en Estados Unidos es una gran vergüenza. El propósito de las reglas es matar la mente de los presos antes de que el gobierno los ejecute. Esto no se puede permitir".

    El 11 de marzo, Pierre Sané, secretario general de Amnistía Internacional, condenó los ataques en SCI Greene y las nuevas reglas: "Cuando visité SCI Greene el 1º de noviembre, me horrorizó el `almacenamiento' infrahumano de los presos condenados a muerte antes de su ejecución. La situación era sumamente debilitante y draconiana. Enterarme de que el Departamento de Correcciones de Pensilvania, sin razón aparente, ha restringido más los pocos `privilegios' de los presos condenados a muerte me llena de horror. ¿Por qué han reducido a la mitad el ya escaso derecho a visitas? ¿Por qué les han quitado la mayor parte de sus pertenencias personales? Temo y sospecho que las autoridades quieran crear una situación tan inaguantable que los presos no la podrán soportar, abandonarán sus apelaciones y permitirán que el gobierno los ejecute. Exhorto a todos los presos condenados a muerte a mantenerse firmes y oponer resistencia a este ataque a su resolución y espíritu".

    Abolicionistas de Pensilvania, un grupo que se opone a la pena de muerte, celebrará un mitin frente al edificio estatal en Filadelfia el 17 de marzo y frente a SCI Greene el 27 de mayo (el comienzo de una semana de protestas en penales por todo el estado). Amigos y Familiares Internacionales de Mumia Abu-Jamal exhorta a llamar o enviar cartas o faxes de protesta a:

    Pennsylvania Governor Tom Ridge, 225 Main Capitol Building, Harrisburg, PA 17120; fax: (717) 783-4429; teléfono: (717) 787-2500

    Martin F. Horn, Secretary Commissioner, Pennsylvania Dept. of Corrections, 2520 Lisburn Road, P.O. Box 598, Camp Hill, PA 17001-0598; fax: (717) 977-0132; teléfono: (717) 975-4859

    SCI Greene Acting Superintendent Benjamin Varner, SCI Greene, 1030 East Roy Furman Hwy., Waynesburg, PA 15370-8020; fax: (412) 852-2909; teléfono: (412) 852-2902

    También se exhorta a enviar cartas de apoyo a Mumia y dinero para enviar sus pertenencias a familiares (giros postales a nombre de Mumia Abu-Jamal): Mumia Abu-Jamal AM8335, SCI Greene, 1040 East Roy Furman Hwy., Waynesburg, PA 15370-8090.


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