Obrero Revolucionario #1134, 13 de enero, 2002, en rwor.org
"Cesantes de bajos ingresos pasan por tiempos difíciles".
"La mayor cantidad de solicitudes de ayuda para desempleados en 10 años".
titulares de primera plana,
USA Today, 30 de octubre
"Me asombró que la Cámara de Representantes aprobara enormes reducciones tributarias para las corporaciones más grandes precisamente cuando el país estaba agitado por las amenazas de ántrax y muy poca gente prestaba atención... El paquete de estímulo económico que propone la Cámara da $1,4 billones a IBM y $844 millones a General Motors..."
Carta a la redacción,
Chicago Sun-Times, 22 de noviembre
El presidente y la estructura de poder dicen que los ataques del 11 de septiembre ponen en peligro "nuestro modo de vida". Afirman que tenemos una causa común con ellos, que debemos unirnos para apoyar las guerras y demás acciones del gobierno y las fuerzas armadas. Pero, preguntamos concretamente: ¿qué es el tan sonado "modo de vida" de que hablan? ¿Acaso las grandes mayorías y la estructura de poder lo comparten y tienen la causa común de defenderlo?
La neta: vivimos en una sociedad dividida en clases, donde "el modo de vida" de los que acaparan el poder y la riqueza es totalmente distinto al de las masas populares. Ni montones de banderas ni de calcomanías de "estamos unidos" podrán borrar esa realidad. A continuación damos unos ejemplos.
Recortan el welfare a los pobres, pero para los ricos abunda
En momentos cuando la recesión golpea duro, están cortando el welfare a miles de personas. La ley de "reforma al welfare" firmada por Bill Clinton en 1996 estableció un máximo de cinco años de ayuda. El plazo de cinco años empezó a cumplirse en diciembre y ya ha afectado a unas 30.000 familias en la ciudad de Nueva York.
Odaliz Luz recibe ayuda; trabaja de recepcionista, pero no le alcanza para mantener a sus cuatro hijos. (Su hijo de 13 años padece un mal muy grave y ha tenido muchas operaciones). Es probable que el gobierno le quite la ayuda; dice Luz: "Para serles muy franca, no sé qué voy a hacer".
Por otro lado, el welfare para las corporaciones abunda. El gobierno ha dado más de $15 billones en paquetes de rescate a la industria de aviación; esta, a su vez, cesó a 100.000 trabajadores, que pasaron a engrosar las filas del desempleo sin que se les ofreciera ninguna clase de ayuda.
De igual modo, el gobierno contempla subsidios para las compañías de seguro, pero millones de trabajadores no tienen para el seguro de salud, lo pagan a duras penas o lo perdieron cuando los cesaron.
En octubre, la Cámara de Representantes aprobó $170 billones en subsidios para la agricultura por un período de 10 años. En palabras de un comentarista: "No crean que ese dinero irá a rescatar al pequeño agricultor. El beneficiario principal de los programas federales es la agroindustria".
Asimismo, la Cámara aprobó un "paquete de estímulo económico" con muchas reducciones tributarias para las corporaciones más grandes. Por ejemplo, anula el impuesto mínimo, según el cual toda compañía rentable paga un impuesto mínimo independientemente de las exenciones a que "tenga derecho". La cancelación del impuesto mínimo es sumamente injusta y le reporta billones de dólares a las cuentas bancarias de las corporaciones cada año.
Para colmo, la Cámara hizo que la medida sea retroactiva por 15 años. Es decir, el gobierno regresaría de inmediato el impuesto mínimo que las corporaciones han pagado por los últimos 15 años, unos $25 billones en total. Entre los mayores beneficiarios están: IBM, $1,4 billones; Ford, $1 billón; General Motors y General Electric, más de $600 millones cada una; y Chevron Texaco, $570 millones.
El Congreso sigue debatiendo el paquete y es posible que lo modifique, pero el hecho es que una mayoría de la Cámara de Representantes --una de las dos cámaras de la rama legislativa-- ha dejado claro que le parece muy bueno regalar billones de dólares a las corporaciones ricachonas y no dar prácticamente nada a los cesantes, los desempleados, los que perdieron el welfare, los que no tienen para el seguro médico, etc.
A las corporaciones capitalistas "afortunadas" se les cae la baba al contemplar las jugosas ganancias que conseguirán de las guerras y del petróleo barato del mundo entero; a "los desdichados" de la clase dominante, como las aerolíneas, el gobierno les regala billones de dólares y les permite --e incluso los anima-- a cesar a miles y miles de empleados, y a recortar prestaciones y salarios. Este es el consenso a que los politiqueros de la clase dominante han llegado en el marco de la dinámica "normal" del sistema capitalista.
Primas de millones de dólares... y miles de despedidos
La gigantesca trasnacional energética Enron, con $50 billones de bienes, se iba a beneficiar de la cancelación del impuesto mínimo. La familia Bush tiene vínculos muy estrechos con esa trasnacional, que fue de los mayores donantes a la campaña presidencial de George W. Pero a principios de diciembre, Enron se declaró en quiebra (la mayor corporación que ha quebrado en la historia del país). El valor de sus acciones subió desmesuradamente en el "auge" de la década pasada, pero cuando quebró, se vio que era un castillo de naipes construido con especulación y fraude.
Pocos días antes de declararse en quiebra Enron pagó primas de $55 millones a los altos ejecutivos. Un vocero dijo que lo hizo con el motivo de "retener a empleados clave" y "proteger y conservar el valor" de la corporación. Pero los desalmados dueños no se molestaron en "proteger y conservar" a los empleados de menor rango. Cesaron a miles y, para colmo, muchos perdieron su jubilación debido a la baja repentina de las acciones.
Mucha gente sin techo desapareció en el siniestro del WTC; la creciente crisis de hambre y desamparo
Es por todos conocido que las Torres Gemelas eran un gran centro financiero y comercial de las corporaciones capitalistas de Manhattan, pero pocos saben que mucha gente sin techo se albergaba ahí. Según el Village Voice: "Los desamparados de toda la ciudad acudían a las torres; en los amplios y concurridos pasillos repletos de tiendas florecía su propia cultura. Dormían en el metro, en los túneles que conectan las líneas E y A".
Desde el 11 de septiembre se desconoce el paradero de muchos de ellos. Un luchador social que los ayudaba le dijo al Voice: "Se me hace que muchos no lograron salir. Se debe hacer una investigación, pues a lo mejor dejaron parientes". No se sabe con seguridad, pero se teme que más de 50 personas sin techo murieron en el siniestro. Integraban las nuevas legiones de gente sin techo en Nueva York y en todo el país. En los meses antes del 11 de septiembre, 29.000 personas acudieron a los albergues de la ciudad de Nueva York, 8000 más que hace tres años y la mayor cantidad en la historia de la ciudad. Según un sondeo, desde el año pasado, 19 de 27 ciudades han registrado aumentos en la gente que pide alojamiento de emergencia.
Con más despidos y el recrudecimiento de la recesión, habrá más gente sin techo. Un luchador social dice: "La situación está peor que a finales de los 80 porque ahora más familias con niños se encuentran en el desamparo".
Además, hay más hambre. Según el sondeo mencionado, las solicitudes de ayuda de emergencia para alimentos aumentaron en 25 de las 27 ciudades. Ante ese aumento repentino, las autoridades han reducido la frecuencia o la cantidad de alimentos, o simplemente han negado las solicitudes. Según otro estudio, 23 millones de personas acudieron a las despensas de comida este año, un aumento de 9% desde 1997. No son simplemente los desamparados y los más pobres; la cuarta parte son dueños de casa y gente que trabaja, y la mayoría son madres e hijos.
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Los grandes capitalistas se jactan de que "este es el mejor mundo que pueda existir". Lo es: ¡para su clase! Pero para los proletarios que trabajan en fábricas, hospitales y hoteles, en zonas urbanas, suburbios, pueblos y en el campo, y para los oprimidos del mundo, ¡es un infierno total! Decir que este terrible estado de disparidad global es lo mejor que puede existir es confesar que este sistema es un fracaso total, incapaz de brindarle un futuro mejor a la mayoría de la humanidad".
Del Borrador del Programa del
Partido Comunista Revolucionario, EU
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